dimecres, 21 de desembre del 2011
Vida
El cambio de bando no satisfizo a Vicente. Le dijo al sargento que él no era, bueno, que si podía encontrar a otros más dispuestos, pues mejor. ..El sargento lo entendió. Al día siguiente se le dijo que uno de los fusilados era seguramente primo de su mujer. El frente se hacía duro en aquel inicio del 37, con frío, mucho frío y sin saber de los suyos. Esto es lo que debe ser una guerra-se dijo-sin saber de quién fiarse. Pero le dio la vuelta. Se dijo que aquello no iba a durar toda la vida, que tenía que encontrar la manera de salir adelante, de reencontrarse con su mujer y su hijo y de retomar su vida.
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